El mariscal de campo de Florida, Anthony Richardson, corrió una carrera de 40 yardas de 4.43, estableció récords estatales en saltos verticales y amplios, y luego lanzó el balón sin esfuerzo 50 yardas por el campo el sábado. Terminó lo que llamó una semana que «cambió la vida» en el combinado de cazatalentos de la NFL. Recordó su tiempo en Indianápolis con el veterano escritor Vic Tafur.
Estar rodeado de todos los grandes jugadores y conocer a todos los grandes entrenadores que he visto en la televisión a lo largo de los años me cambió la vida. Aunque el horario era una locura, me divertí mucho. Te levantas temprano todos los días y te acuestas muy tarde después de las reuniones formales con los equipos, pero eso es parte del proceso y no me estoy preocupando ni un poco. Me inscribí en esto, así que no tuve más remedio que amarlo, y seguro que lo hice.
Conocí a más de 20 equipos y cada equipo parecía estar tratando de conocerme como persona en un período de tiempo muy corto. Soy una persona reservada y no tan extrovertida como otros mariscales de campo, pero siento que he podido descubrir quién soy. Normalmente, me gusta mantener las cosas en privado dentro de mi propio círculo, pero esta no es una situación normal.
Escuché que podría haber algunas preguntas estúpidas de los equipos, pero no las hubo, así que fue una sorpresa. Mi pregunta favorita cada vez que me preguntan sobre mi familia. Me encanta hablar de mi familia – por eso pude seguir unida – y presumir de ellos es lo mejor.
Mi madre tenía dos o tres trabajos, así que llevaba a mi hermano menor a la escuela todos los días. Él es como mi hijo. Creo que los compañeros se sorprendieron porque yo tenía 20 años. Pero soy muy maduro para mi edad.
Todo lo que condujo a entrar al campo el sábado por la noche, no voy a decir que no estaba nervioso, estaba un poco ansioso por salir y mostrar lo que podía hacer. Siento que mi equipo y me preparé de la manera correcta y pude salir y divertirme.
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Richardson, de 6 pies 4 pulgadas y 244 libras, corrió la carrera de 40 yardas en 4.43 segundos, 40.5 pulgadas en el salto vertical y 10 pies, 9 pulgadas en el salto de longitud. Los saltos son los récords combinados de la NFL para un mariscal de campo.
Para los 40, sé que tengo una gran segunda marcha, por lo que es el comienzo para mí. Una vez que sentí que entré en los calentamientos, supe que iba a ser una buena carrera. Soy una persona poderosa y sé que voy a ganar velocidad y potencia.
yo dic. Empecé a entrenar el día 26 y después de la temporada me tomé dos semanas de descanso para despejarme y luego estoy de vuelta. Dark (Sports Performance en St. Augustine, Fla.) me ayudó a mejorar mi cuerpo y mi mente y me ayudó con mi mecánica. No solo confío en mi brazo fuerte y uso más mis caderas. El músculo solo puede llevarte hasta cierto punto.
Cuando se trataba de dos saltos, estaba realmente decepcionado con mis números. He estado saltando cercas, columpiándome de un lado a otro desde una edad temprana, y siempre mirando para ver qué tan alto podía alcanzar. Sacamos el colchón de mi mamá de su cuarto y lo pusimos en la sala y nos volvimos locos con el ida y vuelta y todo lo demás.
Pensé que obtendría 41 (pulgadas) y 11 pies, pero bueno, no me puedo quejar demasiado. Eran récords. No estoy seguro de volver a intentar todo esto en mi día profesional. Discutiré esto con mi equipo.
Es divertido competir contra estos otros mariscales de campo, algunos los conozco desde hace cuatro o cinco años, algunos más que eso. Pasar la última semana juntos, en el punto en que estamos a punto de cumplir nuestros sueños, es maravilloso. Nos amamos, pero sabemos lo que hay sobre la mesa y nos enamoramos.
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Creo que, con cualquier mariscal de campo, cuando ves a su hermano romperlo y romperlo allí mismo, nos hace sentir mejor a todos. El sábado por la noche fue igual. Todos nos felicitamos.
Un reportero el otro día. Dije algo sobre ser un proyecto, pero siento que no tengo nada que demostrarle a nadie más que a mí mismo. Confía en mí, sigue creyendo y sigue moliendo todos los días. Puedo lanzar una pelota, puedo correr, puedo saltar alto, soy inteligente. Todos saben eso.
Se trata de mantener el impulso.
(Foto: Stacey Revere/Getty Images)
